Sentando  los fundamentos

Workers against Lenin. Labour Protest and the Bolshevik Dictatorship 1920-22. By Jonathan Aves. IB Taurus.

[Trabajadores en contra de Lenin. La protesta de los obreros, y  la Dictadura de los Bolcheviques,  1920-22. Aves de Jonathan ]



Un tal  llamado  Estado Obrero que oprime a los trabajadores no fue  una cuestión   que ocurrió solamente durante el periodo de Stalin. También aconteció durante  el liderazgo de Vladimir Lenin y  León Trotsky, de hecho,  ellos fueron  los que sentaron las bases para que  la dictadura Estalinista se reforzara más tarde.


En el  1920 la Guerra Civil  había terminado,  y las potencias occidentales habían levantado el embargo que habían impuesto en contra de Rusia. Los trabajadores  habían sufrido terriblemente  la escasez de alimentos y de  combustibles,  y  habían vivido la  férrea  disciplina impuesta en los centros de trabajo, y  esperaban que después de  este periodo  sus condiciones iban a mejorar. El gobierno bolchevique, sin embargo, no creo medidas inmediatas para satisfacer las aspiraciones de los trabajadores en ese sentido. El resultado motivo una enorme  ola de descontento entre los trabajadores  que duraron  hasta el 1922,  y  es basado en estos acontecimientos que Jonathan Aves analiza en detalle su libro, tomando como base los  informes de la prensa y  materiales de archivo.


Al llegar el periodo de paz  se dio un debate en el Partido bolchevique en  cómo bregar con los obreros. Trotsky, rebosante de sus éxitos como comandante en jefe y comisario del Ejército Rojo, fue el que más se destaco en irse  a favor de la militarización de los obrero, lo cual significaba que el que se ausentaba de los centros de trabajo sería considerado  como acto de deserción, y las huelgas serian consideradas  como  motines, y los transgresores  serian  castigados de acuerdo con los términos de el código  de disciplina militar. Lenin que era  más flexible;  quería mantener la dictadura bolchevique a toda costa, y estaba dispuesto a hacer algunas concesiones a los trabajadores para lograr su objetivo. Otro grupo, conocido como los “trabajadores” de oposición “, compuesto en gran parte de los sindicalistas bolcheviques, fueron  más favorables a las demandas de los trabajadores.


Los trabajadores rusos en ese momento tenían  muchas quejas. Ellos  se opusieron a que no  se les dieran   tiempo libre para buscar alimentos y madera en el campo. Ellos se opusieron a tener que trabajar horas extraordinarias no remuneradas obligatorias en fiestas tradicionales, incluso en el día primero de mayo. Ellos se opusieron a que los  sindicatos fueran tomados por los Bolcheviques, y fueran convertidas  en órganos de gestión o de control administrado por el partido, se opusieron a la  disciplina en los centros de trabajo, y obligarlos a acelerar la producción. En una serie de lugares  se declararon en huelga y eligieron a sus representantes, lo cuales no eran Bolcheviques, pero eran  anti-zarista, como los  Mencheviques y los anarquistas.


Lenin no estaba satisfecho. Las huelgas fueron reprimidas. Muchos de los huelguistas fueron enviados a campos de trabajo forzados. Algunos fueron fusilados. Algunas concesiones  no fueron finalmente hechas  hasta el 1921 cuando Lenin anunció en  el decimo   Congreso del partido Bolchevique un nuevo plan económico,  que entre otras cosas, permitía  a los campesinos operar de nuevos sus   mercados locales,  lugares donde tradicionalmente los trabajadores compraban sus alimentos con anterioridad.


Pero había un precio – la represión de los pocos vestigios del sindicalismo independiente que habían  logrado sobrevivir a los primeros años de la dictadura bolchevique. Los sindicatos fueron  incorporados bajo el control del estado, de hecho, dejaron  de ser sindicatos, se convirtieron en  órganos estatales,  similares a los  Frente Laborales de  Hitler  que fueron más tarde establecidos  en Alemania. Todas estas cuestiones que se han señalado, ocurrieron durante el tiempo de Lenin y Trotsky, y no fueron el producto posterior del “estalinismo”. Los dirigentes  Menchevique  se vieron obligados a exiliarse. Los “trabajadores” de oposición “- y todos los demás” grupos  “- dentro del  partido bolchevique fueron  prohibidos, por lo que se estableció  el principio de” la unidad monolítica ” y  la próxima víctima iba a ser uno de sus principales arquitectos. León. Trotsky.


Desde el punto de vista socialista  los bolcheviques habían  llegado a situarse ellos mismos  en una posición imposible. Habiendo  tomado el poder como una minoría,  en un país donde el socialismo no era  posible ser establecido por muchas  razones (el atraso económico, el aislamiento del resto del mundo, la falta de una voluntad mayoritaria por el socialismo), no tenían otra alternativa que hacer la única cuestión  posible: continuar desarrollando el capitalismo.


Los bolcheviques se encontraron ellos mismos  en la   posición de tener que presidir y de  organizar – la acumulación original de capitales. Pero, como acumulación capitalista es el producto de la plusvalía, o el excedente obtenido  mediante la explotación del trabajo asalariado -, esto  coloco a los Bolcheviques  en conflictos con los mismos  trabajadores, los cuales  por igual e inevitablemente, trataron  de evitar ser explotados. Los bolcheviques se opusieron y reprimieron  las luchas de los trabajadores justificando sus acciones  basándose en la excusa de que ellos  (los bolcheviques) representaban a largo plazo los intereses de los trabajadores. Pero ¿en realidad,  era  cierto?


Ciertamente, alegaban  que actuaban  para promover la causa del socialismo, pero cuando  Marx formulo  su concepción materialista de la historia,  había señalado que no se debe juzgar un movimiento histórico por  lo que dice – sino por lo que hace, y  por lo que objetivamente  hizo. Y objetivamente los bolcheviques lo que hicieron fue desarrollar el capitalismo en Rusia de la misma manera que el  propio Lenin en sus momentos más honesto había  llamado capitalismo de Estado.